Con
ayuda de un Biopolímero se trató el agua residual de lavandería hasta en tres
ocasiones con un proceso fisicoquímico llamado
coagulación-floculación-sedimentación acompañado de un tratamiento de
desinfección con un filtro de zeolita, carbón activado y rayos UV. Se utilizó
una lavadora comercial donde se lavó en 16 ocasiones diferentes tipos de ropa,
para el lavado inicial se utilizó agua potable y los siguientes lavados fueron
con agua tratada. Se realizaron tres tratamientos a un mismo volumen de agua y
se obtuvo en promedio un 95% de remoción de sólidos suspendidos logrando una
recuperación del 82% de agua de manera directa. Las pruebas de jarras muestran
que en 12 minutos se clarifican 820 litros de agua floculada. Los parámetros
que se analizaron durante cada etapa de tratamiento fueron el pH y Sólidos
Disuelto Totales (TDS), Turbidez y Demanda Química de Oxígeno (DQO).
Para disminuir las exigencias sensoriales y de
fuerza al momento de operar la planta de tratamiento se instaló un Controlador
Lógico Programable (PLC) y una pantalla HMI (Interfaz Humano Máquina) para el
control y monitoreo en tiempo real de cada etapa del proceso. Con la
instrumentación de dispositivos pulsadores, sensores de nivel y contactores se
configuró un programa automatico para el encendido y apagado una bombas y
emisión de alertas. El control se puede hacer de forma manual con una botonera
o la pantalla HMI incluso se puede ampliar la capacidad para ser operado
mediante una computadora, celular o tablet con acceso a internet.